¡Cortémoslo todo!

Gualeguaychú, Colón y Concordia

Más allá de una intención de presunta conservación ambiental por intermedio del uso de árboles provenientes de bosques planeados bajo la idea de presunto desarrollo sustentable, lo que podría ser planteado son acciones preventivas, o sea, de reducción del consumo de papeles y de desarrollo de tecnologías ecológicas en el intuito de sustitución de este material.

¡No!, ninguna papelera internacional o nacional debe funcionar sea acá sea en cualquier otro sitio del mundo porque la actividad en cuestión no es buena para nada, para nadie y muy maléfica para la ecología. Antes de crear papeles hace falta reducir su consumo y desarrollar tecnología ecológica de sustitución de ese tipo de material.

¡No!, no hace falta existir diplomacia internacional para solucionar este problema, ya que a lo mejor el pueblo puede organizarse sólo por el hecho de que, al fin y al cabo, es al pueblo a quien quedarían los primeros daños ambientales.